miércoles, 2 de abril de 2008

Normal Nor MAL

Definitivamente hay cosas que no comprendo. Y cosas que me crispan a no poder más. Intento mantener mi pin-logo de hija del 68, hippie transformada a biopija y "haz el amor y no la guerra". Pero cada vez me cuesta más decir la frasecita esa de "es que yo no creo en la violencia física".
Vale, estoy exagerando. Pero hay cosas que me exasperan.
Como descubrir integrismos donde en principio no deberían. Es normal que con muy pocos años seas tan reaccionario que mi abuela a tu lado sería una pancartera? El integrismo hace daño.
Y todo esto viene a cuento porque hablé con alguien de algunos temas (la tríada religión, política y sexualidad/sexo, qué más hay en el mundo?) en los que yo, para empezar, no tengo las cosas claras. Pero es que tú las tienes menos, y eso que respeto con esa devoción religiosa que tu me reclamas lo que dices. Tu único argumento es la normalidad. Te equivocas. Lo normal en su día era que viviéramos en cuevas, y alguien, oh, herejía!, descubrió el fuego y oh, pecado mortal! otro alguien inventó la rueda.
A partir de entonces la evolución (o involución dirás) ha sido imparable. Yo considero que vivimos mejor que en el momento pre-fuego y pre-rueda. Me argumentarás nosequé de la familia. Te diré dos cosas: el ser humano es promiscuo por naturaleza, no me hagas citar mil libros, pero si los quieres te los paso. La familia es algo cultural. Mi familia no son aquellos con los que me relacionan mis genes, mi familia son aquellos con lo que me emparientan mis neuronas, por tanto me da igual que el transexual del que hablábamos fuera o no a darle una familia normal al futuro bebé. El resto son pluses, me rebatirás y muy bien hecho el concepto de sexualidad y nosequé de un padre y una madre. Un padre que abusa sexualmente es un padre? Y la madre que consiente, completa la familia? Es de hipócrita exigir modelos de vida en una época en la que con un par clicks puedo conquistar el mundo. Te diré que yo no creo en la sexualidad definida. Ya te dije que soy una hetero atrapada en el cuerpo de una lesbiana.
Discutiremos sobre religión, porque cuando hablamos de sexo y familia es lo que viene después. Te consideras más religios@ que yo. Seguramente lo eres. Probablemente tu fe movería montañas. Pero eso no te hace mejor que yo (hetero atrapada en el cuerpo de una lesbiana) o mejor que el futuro papá que dará a luz. Y si te lo hace mejor a los ojos de tu dios, pues la verdad, menudo dios te has ido a buscar. Ya te invitaré a algo en el infierno, que como decía una gran amiga mía (parte de mi estupenda familia no consanguínea) tiene las mejores compañías, y tal vez la mejor temperatura para una friolera como yo. Me vuelvo a Wiggestein (tuvo que salir un nombre alemán), te diré que es una discusión errónea porque de ética y estética no se puede hablar.
Me ha encantado cruzar las mil palabras que hemos cruzado. Me encanta que me desafíes, pero ojala fueras capaz de alzar el vuelo un poco más. Y sobre todo (y esto te lo diría como bien sabes mirándote a los ojos) tu moralidad no te hace mejor (ni peor) que yo ni que nadie.

1 comentario:

Alexandra González dijo...

Te acabo de mandar un sms... con mis problemas de aislamiento(me dejé el movil en el coche de dani... y este no ha tenido vida hasta hoy) y técnicos... justo cuando vuelve a recaer en mis manos y lo enciendo... me llega un gracioso mensaje de ha superado su limite de saldo... por lo tanto abstengase de comunicacion con el resto del universo hasta el 15 de mayo.

pero... no me olvidé. pensé en tu super copa boadas, tu sonrisa y un leve lagrimeo de esos en los que reconoces como todos t admiramos y te queremos.

un beso preciosa :)