jueves, 22 de mayo de 2008

BCN no es Londres. Londres no es BCN

Evidentemente Londres no es Barcelona.
Evidentemente Barcelona no es Londres.
Pero en día como hoy, de lluvia, de rascarse heridas, de recordar cicatrices, de nubes grises y edificios entre la neblina y los paraguas de 3 euros, lo parece.
Parece ese Londres que visitamos hace unos meses. Con alguien que se parece a nosotros, o alguien que es nosotros decidiendo otras cosas, otros colores, otros gustos, otros matices, otras noches. Otras playas, otros océanos, otras canciones, otras rutas, otros vinos, otras piazas italianas.
Parece como si yo no fuera más yo, sino el fruto de decisiones que no son mías, sufriendo consecuencias ajenas. Los días de lluvia tienen un encanto especial, porque la niebla que se ve desde las ventanas se instala en mi cabeza. No distingo caras, ni gestos. No hay colores, todo es de un gris tenue. Azuloscurocasinegro.
En esta vida lo extraño. En esa vida te extraño. En esta vida me extraño, en esa vida me extraño. En esta vida el mundo es lo que siempre había querido. En esa vida no.
Hoy llueve. Tu pelo se te moja y duele. No importa pero llueve…

No hay comentarios: